9/4/13

Labios y números rojos




Hay momentos en los que la vida te presenta una encrucijada que tienes que solventar de alguna forma. A veces (la mayoría) parece más difícil de lo que suele ser en realidad. A mí me ha pasado en repetidas ocasiones durante este último año, y la causante de todos mis baches ha sido la crisis. 

Esa señorita con tacones de aguja que entró de puntillas para luego ahogarme con ellos. Sí, esa. La de los labios y los números rojos. La que se escondía con un apodo de espía para que nadie pudiera calarla. La que está poniendo en evidencia a la humanidad, la sociedad irreal en la que vivimos y el sistema que alimentamos.

He de decir que está siendo una maldita arrogante que se está cargando la vida de millones de familias. Que los aires de diva están despertando en mí a ese “Hulk” que llevo dentro.